martes, 25 de julio de 2023

WILLIAM WHEWELL


                                                WILLIAM WHEWELL



Filósofo y hombre de ciencia inglés, nacido en Lancaster en 1794 y muerto en Cambridge en 1866. Se dedicó sobre todo a la filosofía de la ciencia y de la ética, disciplina esta última de la que fue profesor en la Universidad de Cambridge.
Nació en el seno de una familia modesta. Su padre, carpintero, pensó dedicarle al comercio, pero las extraordinarias aptitudes del joven William en las ciencias naturales, que estudió en las escuelas de Lancaster y Heversham le persuadieron de que era preferible que se labrara un futuro como profesor. En 1812 fue enviado a Cambridge, de donde salió graduado cuatro años más tarde. En 1820 ingresó en la exclusiva Royal Society por sus estudios sobre geología y mineralogía, disciplina esta última de la que fue profesor y conferenciante. Entre los años 1826 y 1828 recibió el encargo de medir la densidad de la tierra, empeño en el que se enfrascó con Airy y que realizó en las minas de Dolcoath, en Cornwall.
El fracaso de su empeño le hizo abandonar la práctica experimental de la ciencia cuando ya era catedrático. Marchó a engrosar sus conocimientos a Viena y Friburgo, donde tomó interés por la química, en especial la electroquímica. Fue Whewell quien nombró a los iones, al ánodo y al cátodo. Al regresar al Reino Unido en 1832 renunció a su cátedra, persuadido de que sus conocimientos eran muy inferiores a los requeridos para ese puesto. A partir de entonces se ocupó de la ciencia únicamente desde el punto de vista epistemológico en sus investigaciones, a la vez que ejercía un papel político mucho mayor en el mundo universitario. Fue elegido en 1841 presidente de la Academia Británica y director del Trinity College, cargos desde los que emprendió la reforma de la enseñanza en matemáticas, en colaboración con Peacock y Herschel. Hacia 1850 reorganizó y amplió las asignaturas universitarias de ciencias y filosofía.

Inicia sus estudios en la Escuela Haversham en Westmoreland, donde calificó para una beca en el Trinity College de Cambridge en 1812, de donde salió graduado cuatro años más tarde. Estudió matemáticafísicaastronomía y geología, pero también los clásicos griegos y latinos y filosofía, y hasta ganó un primer premio con un poema.


En 1820 ingresó en la exclusiva Royal Society por sus estudios sobre geología y mineralogía, disciplina esta última de la que fue profesor y conferenciante. En 1825 es ordenado sacerdote, requisito del Trinity College.

Entre los años 1826 y 1828 recibió el encargo de medir la densidad de la tierra, empeño en el que se enfrascó con Airy y que realizó en las minas de Dolcoath, en Cornwall. El fracaso de su empeño le hizo abandonar la práctica experimental de la ciencia cuando ya era catedrático.

Whewell fue un verdadero hombre universal, poseedor de una cultura no s�lo profunda sino sorprendentemente amplia y variada; trabaj� en problemas de matem�ticas, f�sica, astronom�a, geolog�a, cristalograf�a, arquitectura, teolog�a, educaci�n, econom�a pol�tica, historia y filosof�a. Sus investigaciones personales sobre la marea y las olas marinas no s�lo fueron muy bien recibidas en su tiempo sino que hasta hoy son aceptadas; adem�s, tambi�n era un humanista distinguido, conocedor profundo de los cl�sicos (que le�a en sus idiomas originales) y de los principales escritores y ensayistas de su tiempo. Pero tambi�n debe haber sido un h�bil pol�tico y administrador, porque adem�s de ser Master del Trinity College ocup� dos veces la vicepresidencia de la Universidad de Cambridge. Finalmente, Whewell demostr� tener gran punter�a para la nomenclatura cient�fica a �l se deben los t�rminos "ion", "electrodo", "�nodo" y "c�todo" (introducidos por Faraday por sugesti�n de Whewell), las designaciones de "uniformismo" y "catastrofismo" para las respectivas doctrinas geol�gicas, y la palabra "cient�fico", que a partir de su tiempo reemplaz� al "fil�sofo natural" aristot�lico. Como colof�n, no est� de m�s agregar que Whewell tambi�n era sacerdote anglicano militante, que se opuso (por "razones" ideol�gicas, no cient�ficas) al darwinismo de su �poca, a pesar de que buena parte de su propia filosof�a de la ciencia estaba te�ida de "evolucionismo".

Investigaciones

Marchó a engrosar sus conocimientos a Viena y Friburgo, donde tomó interés por la química, en especial la electroquímica. Fue Whewell quien nombró a los iones, al ánodo y al cátodo. Al regresar al Reino Unido en 1832 renunció a su cátedra, persuadido de que sus conocimientos eran muy inferiores a los requeridos para ese puesto.

A partir de entonces se ocupó de la ciencia únicamente desde el punto de vista epistemológico en sus investigaciones, a la vez que ejercía un papel político mucho mayor en el mundo universitario.

Cargos

Fue elegido en 1841 presidente de la Academia Británica y director del Trinity College, cargos desde los que emprendió la reforma de la enseñanza en matemáticas, en colaboración con Peacock y Herschel. Hacia 1850 reorganizó y amplió las asignaturas universitarias de ciencias y filosofía.

Fue fundador y presidente de la Asociación Británica para el Avance de la Ciencia, miembro de la Sociedad Real, presidente de la Sociedad Geológica y Magíster del Trinity College, Cambridge.

Escritor

Se le conoce principalmente por sus escritos sobre filosofía de la ciencia, historia de la ciencia y filosofía moral pero fue prolífico escritor en muchos otros tópicos como mecánica, mineralogía, geología, astronomía, teologíaeconomía política, reforma educativa, arquitectura y derecho internacional.

Muerte

Fallece en Cambridge en 1866 al ser arrojado de su caballo.

JHON STUART MILL

 

                                                     JHON STUART MILL

John Stuart Mill (1806 – 1873) fue un filósofo, economista y político escocés defensor del utilitarismo enfocado en  la calidad, la libertad, la igualdad de género y la búsqueda de la felicidad para la mayoría de las personas.

John Stuart Mill nació en Londres el 20 de mayo de 1806. Su padre fue el economista y filósofo James Mill quien sometió a su hijo a un riguroso y exigente método de estudio que incluía la lectura de clásicos de la economía, política, filosofía y derecho a muy temprana edad. Mill hijo no tenía tiempo libre y su padre le obligaba a dar cuenta de sus avances sin darle respiro para que jugara con otros niños ni para el descanso o vacaciones.

A los 14 años, Mill parte a estudiar a Francia filosofía, economía y derecho y empieza a crear obras originales. A los 20 años sufre una crisis depresiva probablemente resultado de la exigencia desmedida a la que le habían sometido. Tras varios años consigue recuperarse abriéndose a otras fuentes intelectuales más alejadas de las ideas que le enseñara su padre. En particular se interesa por las ideas del positivismo de Comte, el socialismo y el romanticismo.

En 1830 conoció a Herriet Taylor, filósofa y feminista con quien se casó 21 años después, cuando ella enviudó. De acuerdo al mismo Mill, Taylor fue una importante fuente de inspiración intelectual.

                                       Principales ideas de John Stuart Mill

La contribución de Stuart Mill abarca varias áreas de la economía, filosofía y derecho. Acá revisaremos de manera simplificada sus principales ideas:

  • Positivismo y empirismo: El conocimiento se deriva de la experiencia por lo que necesariamente es limitado (no podemos observar todo, solo una parte y sacar conclusiones).
  • Libertad y principio del daño: Todos los individuos deben ser libres de tomar las acciones que consideren pertinentes siempre y cuando no impongan daño sobre otros.
  • Libertad de expresión: La libertad de expresar y discutir ideas es una condición necesaria para el progreso social. Aunque las ideas de otros no nos gusten, el debate ayuda a las personas a reconocer los fallos de sus ideas, abrirse a otros puntos de vista y a reforzar el adecuado razonamiento.
  • Democracia con respeto de las minorías: Las sociedades deben crear mecanismos para limitar el poder de los gobernantes que solo buscan su propio beneficio. Asimismo, se debe proteger a las minorías de la tiranía de la mayoría, en donde se imponen ideas solo por el número, pero sin respeto a grupos minoritarios.
  • No a la esclavitud: Renegó de las ideas que supuestamente justificaban la esclavitud (por asumir una inferioridad genética e intelectual).
  • Feminismo: El sometimiento de la mujer constituye un modelo social obsoleto basado en prejuicios y que afecta gravemente el progreso social.
  • Propiedad pública de los recursos naturales: El progreso económico no debe ser a costa de la sobrexplotación y posible extinción de los recursos naturales.
  • Utilitarismo: Se trata del principio de actuar con el fin de conseguir la mayor felicidad para el mayor número de personas posible (dentro de algunos limites como el respeto a minorías). Mill distinguió su concepto de utilidad basándose en la calidad del sentimiento de satisfacción (intelectual y moral es superior al físico) en vez de la cantidad como habían propuesto autores anteriores (como Jeremy Bentham por ejemplo).
  •                             Contribución a la Economía de John Stuart Mill

  • Stuart Mill fue un representante de la escuela económica clásica. En 1848 publicó “Principles of Political Economy” la que sería una de sus principales obras en el campo de la economía. Entre sus análisis Mill investigó el proceso de formación de los salarios, el valor de los bienes basándose en su utilidad y la relación real de intercambio. Mill también expuso la idea de un estancamiento del capitalismo por la reducción progresiva de los beneficios y propuso diversas medidas para la mejora de la distribución de los ingresos en la sociedad.

  •                                                  Derechos de la mujer

  • Mill es además conocido por ser uno de los primeros y más acérrimos defensores de la liberación femenina. Su libro El sometimiento de las mujeres (The Subjection of Women) es una de las obras más antiguas en el campo del feminismo defendido por hombres. El autor notaba que la opresión de la mujer era uno de los pocos vestigios conservados procedentes de modelos sociales obsoletos, un conjunto de prejuicios que impedía arduamente el progreso de la humanidad.

  • La sociedad en que Mill vivía solo tenía una consideración respecto a la mujer: el ser educada de tal manera que fuese más atractiva y se volviese un objeto determinado y llamado al matrimonio.60​ Para la mujer no había alternativa, pues no se le permitía una educación o carrera. Esto obligaba a que cualquier posibilidad de dejar la casa familiar pasase ineludiblemente por un marido. Esta noción del matrimonio condicionaba a la sociedad a continuar reduciendo a mujeres a meros objetos y, si pensaban en algo que no conllevase el matrimonio, eran inmediatamente acalladas. Uno de los factores principales que Mill identificó en esta situación era la ausencia de educación, problema que él intentaba solventar.


    Así, Mill luchó por la educación femenina basándose en varios argumentos. El primero fue el hecho de que las mujeres fuesen las encargadas de los cuidados de los niños y de su tutela. La idea era que, en tanto era la mujer la encargada de la instrucción de los infantes (tanto chicos como chicas) hasta que tuviesen edad de entrar en las escuelas (típicamente solo los chicos), los niños recibían una educación defectuosa, pues las propias madres carecían de educación. La única forma, decía Mill, en que una mujer puede criar a sus hijos de manera adecuada era estando educada ella misma.

No hay duda de que el empirista ingl�s m�s conocido del siglo XIX, tanto en su �poca como en la nuestra, es John Stuart Mill (1806-1873), economista, pol�tico, historiador, escritor, editor y fil�sofo, as� como defensor de los derechos femeninos, empleado de la Compa��a de las Indias Orientales por m�s de 30 a�os (1823-1858), finalmente miembro del Parlamento brit�nico (1865), y uno de los m�s grandes victorianos. El padre de Mill (amigo de Jeremy Bentham) decidi� hacer un "experimento" con la educaci�n de su hijo John y lo inici� en el aprendizaje del griego a los tres a�os de edad y del lat�n a los ocho a�os; posteriormente aprendi� hebreo y otros idiomas modernos (franc�s, alem�n, ruso, pero no espa�ol), as� como historia antigua, matem�ticas y l�gica. Es importante se�alar que todo su conocimiento de la ciencia lo obtuvo Mill de segunda mano, a partir de los libros, y no de la experiencia personal. Se trata, pues, de un t�pico fil�sofo de la ciencia. Sin embargo, Mill tambi�n debe haber sido un sujeto interesante, porque a los 23 a�os de edad se enamor� perdidamente de una mujer no s�lo casada sino de la m�s alta sociedad, a la que sigui� amando hasta que el marido muri� y logr� desposarse con ella; este romance alcanz� gran popularidad en la sociedad victoriana, adem�s de que para Mill represent� el est�mulo para sus actividades en pro del feminismo, incluyendo sus escritos, muchos de los cuales fueron firmados por la feliz pareja.



JOHN HERSCHEL

 


JOHN HERSCHEL

John Frederick William Herschel ​ fue un matemático y astrónomo británico, hijo del astrónomo William Herschel.




John Herschel popularizó el uso de la fecha juliana en astronomía e inventó la cianotipia.23​ Acuñó los términos «fotografía», «negativo», «positivo» y descubrió el uso del tiosulfato de sodio como fijador de las sales de plata. También informó a Henry Fox Talbot de que su propio descubrimiento del tiosulfato de sodio fijaría sus fotografías haciéndolas permanentes.

Comienzos y trabajos en astronomía

Herschel nació en SloughBuckinghamshire, y estudió en Eton College y St John's College, Cambridge.5​ Se graduó con la máxima puntuación en 1823. Durante su etapa de estudiante se hizo amigo de Charles Babbage y George Peacock; precisamente fue la corrección de errores sistemáticos en tablas astronómicas, tarea en la que trabajaron ambos, lo que animó a Babbage a construir una máquina automática de cómputo que eliminase el trabajo humano a sugerencia suya.

Empezó con la astronomía en 1816, cuando construyó un telescopio reflector con un espejo de 45,72 cm de diámetro y 6,096 metros de largo. Fue uno de los fundadores de la Real Sociedad Astronómica en 1820,6​ siendo su presidente en tres períodos: 1827-29, 1839-41 y 1847-49.78

Entre 1821 y 1823 reexaminó, junto con James South, las estrellas binarias catalogadas por su padre. Por este trabajo logró en 1826 la Medalla de oro de la Real Sociedad Astronómica (la volvería a ganar en 1836) y la medalla Landale del Instituto de Francia en 1825. La Royal Society le otorgó además la Medalla Copley por sus contribuciones matemáticas. Fue nombrado Sir en 1831.


aportaciones de John Herschel

El mejor astrónomo observador de todos los tiempos, y un gran estudioso de la ‘construcción de los cielos’, William Herschel, es una figura poco conocida por el gran público. Sin embargo, su biografía es apasionante y su legado científico, junto con las aportaciones de su hermana Caroline y su hijo John, uno de los más importantes de la historia de la astronomía.

Además de ser el descubridor de Urano, William Herschel no sólo fue el mayor constructor de telescopios de la historia, también fue el descubridor de la radiación infrarroja de los astros, y el auténtico pionero de la astronomía estelar, del estudio de la Galaxia y de la identificación de nebulosas.

Herschel fue un hombre de grandes talentos aunque no se distinguió por ser un excelente estudiante, sino hasta su ingreso al St. John’s College en Cambridge. En el campo de la astronomía fue electo secretario de la Real Sociedad Británica por sus trabajos en sistemas de estrellas binarias, asimismo publicó trabajos sobre sus observaciones del cometa Halley, que posteriormente conllevarían a concluir las teorías del viento solar.

También dedicó su existencia al estudio de las matemáticas, la filosofía de las ciencias y por supuesto a la fotografía. Una de las pocas fotografías conocidas de Herschel es la del telescopio del observatorio su padre. Se considera una de las primeras fotografías tomadas sobre placa de vidrio, actualmente se le puede observar en el museo de Ciencias en Londres.

Herschel notifica el asombro que los daguerrotipos le causaron en una carta personal enviada a Talbot, en que cita:

…difícilmente es exagerado llamarlos milagrosos. Sin duda alguna sobrepasan cualquier cosa que hubiera yo podido concebir dentro de los límites de la expectación razonable… Cada gradación de luz y sombra está representada con la suavidad y fidelidad que colocan a toda pintura a distancia inmensurable… Si tuvieras unos cuantos días disponibles… ven a ver!

(Leggat, 1995).

Dentro de otros trabajos fotográficos realizados por Herschel, podemos mencionar; el descubrimiento respecto a la sensibilidad de los haluros de plata, el uso de hierro en materiales fotosensibles, describiendo así el proceso de la cianotipia e inclusive al poco utilizado proceso de la anthopía.


Gracias a su eminencia como fil�sofo natural, Herschel fue invitado a escribir una introducci�n a la Cabinet encyclopaedia ("Enciclopedia de gabinete"), una colecci�n de libros semipopulares de la �poca; el texto deber�a referirse a la filosof�a y a la metodolog�a de la ciencia. Herschel llam� a su libro Preliminary discourse on natural philosophy ("Introducci�n a la filosof�a natural") y lo public� en 1830 con gran �xito, alcanzando varias ediciones y reimpresiones, la �ltima en 1987, por la imprenta de la Universidad de Chicago, que es la que yo he usado. El art�culo sobre Herschel de la Enciclopedia Brit�nica comenta sobre este libro: "...posee un inter�s que no pueden obliterar ninguno de los avances futuros en los temas en que escribi�."

Las ideas de Herschel son importantes porque �l representa un ejemplar de una especie casi en extinci�n, no s�lo en su tiempo sino tambi�n en el nuestro: el cient�fico activo y productivo, seriamente interesado en la filosof�a de su profesi�n; adem�s, el libro de Herschel fue el primero que se escribi� en ingl�s con esas especificaciones. Es aparente que el texto se basa sobre todo en las ideas de Bacon, de Hume y del propio autor, mientras que el resto de la literatura sobre metodolog�a cient�fica, ya existente en esa �poca, se pasa por alto. Por lo tanto, a sus m�ritos ya mencionados Herschel agrega uno m�s: se trata de un amateur de la filosof�a de la ciencia, que llega a ella con toda la ingenuidad del aficionado a la filosof�a, pero tambi�n con toda la autoridad del profesional de la ciencia. Veamos qu� es lo que nos dice.

Herschel fue quiz� el primero en se�alar con precisi�n que para cada nuevo hecho cient�fico, para cada hip�tesis confirmada por datos experimentales, para cada teor�a que predice con �xito nuevas configuraciones de la realidad, hay dos aspectos claramente distintos: por un lado, el descubrimiento, y por el otro, su verificaci�n. Herschel insisti� en que el m�todo para formular una hip�tesis o teor�a no tiene absolutamente nada que ver con su mayor o menor aceptaci�n: una inducci�n cuidadosa, precisa y sistem�tica, puede tener el mismo valor que una adivinanza moment�nea, o hasta que un "volado", si sus predicciones deductivas se cumplen en la realidad. El proceso cient�fico tiene, como casi todas las monedas, dos caras diferentes: una es la cara (o contexto) del descubrimiento, y la otra es la cara (o contexto) de la validaci�n o justificaci�n. En la ciencia, como en la numism�tica, las �nicas monedas que no tienen dos caras diferente son las falsas.

Herschel también fue un químico altamente consumado. Su descubrimiento en 1819 del poder solvente del hiposulfito de sodio en las sales de plata insolubles fue el preludio de su uso como agente fijador en fotografía; e inventó en 1839, independientemente de Fox Talbot, el proceso de fotografía en papel sensibilizado. Fue la primera persona en aplicar los conocidos términos "positivo" y "negativo" a las imágenes fotográficas, y en imprimirlas sobre un vidrio preparado con el depósito de una película sensible.

Durante la década de 1840, Herschel trabajó en Outlines of Astronomy (1849), un libro para laicos educados. Este texto muy exitoso científico pasó por muchas ediciones, incluyendo árabe y chino. Pero la mayor parte de su tiempo estuvo ocupado con los resultados de las observaciones astronómicas, realizadas durante los años 1834-1838 en el Cabo de Buena Esperanza (1847). Este trabajo contiene catálogos y cuadros de nebulosas del cielo del sur y cúmulos estelares, un catálogo de las posiciones y magnitudes relativas de las estrellas dobles del sur, y sus observaciones sobre las variaciones y el brillo relativo de las estrellas.
Como resultado de su búsqueda de un cargo público, a finales de 1850 Herschel fue nombrado maestro de la Casa de la Moneda. La tensión del trabajo hizo que su salud se deteriorara; se deprimió y en 1854 sufrió una crisis nerviosa. En 1856 renunció a su cargo en la Casa de la Moneda. Pasó los años restantes trabajando en los catálogos de estrellas dobles y de nebulosas y cúmulos estelares.


jueves, 20 de julio de 2023

INTRODUCCIÓN A LOS EMPIRISTAS VICTORIANOS

 

INTRODUCCIÓN A LOS EMPIRISTAS VICTORIANOS


LA ERA VICTORIANA | SITUACIÓN

El Imperio Británico vivió la época de máximo esplendor a mediados del siglo XIX. Cuando la Reina Victoria I subió al trono, Inglaterra mantenía una economía agraria y rural; cuando la reina murió, dejó un país evolucionado, con ferrocarril, industria y una nueva clase social que, a partir de ese momento, tendría un papel muy importante. En la Era Victoriana Gran Bretaña se convierte en la primera potencia mundial, su economía prospera y con ellas sus ansias imperialistas, culminadas cuando la Reina Victoria es proclamada Emperatriz de la India, como última colonia anexada al Imperio. Gran Bretaña contaba con una gran flota y se había hecho dueña del comercio marítimo y preparada para la gran revolución industrial.
Victoria I reinó durante un largo período de tiempo, iniciando su reinado cuando sólo contaba con 18 años tras la muerte de su tío paterno, el Rey Guillermo IV, el 20 de junio de 1837. No abandonó el trono hasta su muerte, a los 63 años de edad, en el año 1901.
La reina Victoria siempre intentó proteger los intereses cosmopolitas de la época y quiso estrechar relaciones internacionales entre las distintas casas monárquicas europeas, casando a sus hijos con herederos y herederas de las distintas casas monárquicas de la vieja Europa. Una reina con grandes influencias germánicas y también casada con un germano, el Príncipe Alberto. Su primera hija, Victoria se convertiría más tarde en la esposa de Federico III, Kaiser de la Alemania Imperial.

LA ERA VICTORIANA | ECONOMÍA

La creación de nuevas fábricas supuso también un empujón en la industria siderúrgica, las explotaciones coloniales comenzaban a ser mas rentables que nunca. La revolución de los transportes con  la aparición del ferrocarril y del barco a vapor, hacen necesaria la creación de una industria más pesada, una industria creada para el hierro, el acero y el carbón.

LA ERA VICTORIANA | LA SOCIEDAD

Hegemonía del Imperio Británico a nivel internacional y la creciente popularidad de la monarquía como un símbolo de unidad nacional. Los estamentos estaban claramente diferenciados:
  • La Nobleza
  • Alta burguesía
  • Clase Media
  • Obreros/trabajadores

Frente a una alta sociedad que nunca había desaparecido, llena de nobles y de grandes propiedades, aparece la alta burguesía, una clase que originariamente eran comerciantes y que con la revolución industrial, se habían convertido en los nuevos ricos, que nunca podrían optar a clases sociales más altas pero que eran los que realmente manejaban la economía.

Por último la clase de los obreros y trabajadores, siempre a merced de la disponibilidad de un jornal para poder vivir, es la clase más baja, los parias de la sociedad. Tendrán un papel importante dentro de las revoluciones sociales de la época, gracias a la posterior aparición de los sindicatos, que lucharía para mejorar las condiciones de estas clases más desfavorecidas.

LA ERA VICTORIANA | LA MUJER

LA ERA VICTORIANA – LA MUJER EN EL TRABAJO

Pocos trabajos había para las mujeres, ya que se les consideraba que estaban hechas para cuidar de la casa, de la familia y que debían estar cuidándose personalmente, siempre, para estar ideales consigo mismas y sus maridos. Pero entre la clase media baja, las mujeres debían encontrar un trabajo, porque el salario de su marido era más bien bajo.
El trabajo para los que se las solicitaba era en su mayoría como sirvienta y tenía que estar bajo el techo de sus jefes, además de cobrar muy poco. Si no eran sirvientas, eran enfermeras, trabajaban el algodón o comerciantes, trabajos que sólo se les encargaba a ellas. Con el paso del tiempo, las mujeres comenzaron a aspirar otros trabajos y se convirtieron en maestras y cuando apareció en 1876 el teléfono, se crearon puestos en una centralita, para las llamadas, que llevaban ellas.

LA ERA VICTORIANA – LA MUJER CASADA

Era el objetivo principal por el que se les educaba. Desde pequeñas se les enseñaba a ser calladas, inocentes y delicadas, casi indefensas, para que el hombre se sintiese grande y protector. Pero aun así, tenían que mostrar gran inteligencia y gracia, para que también el marido, pudiese presumir de ellas. En cuanto al patrimonio. Todo lo que fuera de ella, acababa siendo de él, en el momento en que se casaran, pero gracias a la ley de propiedad de 1887, se le garantizó la ley propiedad, de manera que en el caso de divorcio (que eran muy pocos), ella seguiría teniendo derecho sobre sus hijos y sobre sus posesiones.

Entretenimiento

Las bandas de música municipales y los quioscos de música fueron populares durante esta época. El quiosco de música es una construcción simple que no solo crea un lugar ornamental, sino que además facilita las necesidades acústicas a la vez que ofrece protección ante el cambiante clima británico. Era común escuchar el sonido de las bandas mientras se paseaba por los parques. En aquellos tiempos la grabación musical era aún algo muy novedoso.

Otra forma de entretenimiento que podemos incluir en espectáculos son las relacionadas con los sucesos paranormales, como la hipnosis, la comunicación con los muertos (por medio de un vidente o canalizador), la invocación de fantasmas, espíritus y similares. Estas actividades fueron muy populares comparando con periodos más recientes de la historia occidental y se llevaban a cabo para el mero deleite de las masas y sus participantes.

La literatura también fue una forma muy popular de entretenerse en la Época victoriana y surgieron grandes escritores que aunque causaron escándalo son reconocidos hoy en día.


Tecnología

La mejora de los medios de comunicación constituyó uno de los principales ejes del desarrollo de la economía victoriana. Diligencias, grandes barcos de vapor, canales y, sobre todo, ferrocarriles facilitaron el transporte de personas, bienes y materias primas, promoviendo el auge del comercio y de la industria. Muchos de los principales adelantos de la ingeniería de esta época se debieron a Isambard Kingdom Brunel.42​ Brunel tuvo una participación directa en la construcción del ferrocarril del oeste y los trasatlánticos SS Great WesternSS Great Britain y SS Great Eastern.

Otro hito de la ingeniería victoriana fue el sistema de alcantarillado de Londres, encargado a Joseph Bazalgette. La mayor parte de la obra se realizó entre 1859 y 1865. Se necesitaron 318 millones de ladrillos, 670 000 metros cúbicos de cemento y se excavaron 2,7 millones de metros cúbicos de tierra. El proyecto consistía en la construcción de seis interceptores de 132 km de longitud que recogían el flujo de 720 km de colectores alimentados por los 21 000 km de alcantarillas más pequeñas existentes en las calles.43​ Después, Bazalgette proyectó el Thames Embankment, dique en la orilla norte del río Támesis bajo cuya superficie se halla el interceptor principal de bajo nivel del sistema de alcantarillado procedente del oeste, diversas tuberías de distribución de agua potable e incluso parte algunas líneas del metro de Londres. Durante este mismo período, la red de suministro de agua de Londres se expandió y mejoró. En los años ochenta del siglo xix se puso en servicio una red de gas para iluminación y calefacción. La invención del manguito incandescente para gas popularizó la luz de gas hasta bien entrado el siglo xx. Las primeras luces eléctricas se instalaron en Newcastle upon Tyne gracias a las investigaciones de Joseph Wilson Swan.

Durante la época victoriana, la ciencia creció hacia la disciplina que es hoy en día. Además del incremento del profesionalismo de la ciencia universitaria, muchos caballeros victorianos dedicaban su tiempo al estudio de la historia natural. En 1859 Charles Darwin hizo pública la teoría de la evolución en su libro El origen de las especies. La fotografía se inició en 1839 por Louis Daguerre en Francia y por William Fox Talbot en Inglaterra. Hacia 1900, estaban disponibles las cámaras portátiles.

jueves, 13 de julio de 2023

RENÉ DESCARTES

 

RENÉ DESCARTES

(La Haye, Francia, 1596 - Estocolmo, Suecia, 1650) Filósofo y matemático francés. Después del esplendor de la antigua filosofía griega y del apogeo y crisis de la escolástica en la Europa medieval, los nuevos aires del Renacimiento y la revolución científica que lo acompañó darían lugar, en el siglo XVII, al nacimiento de la filosofía moderna. El primero de los ismos filosóficos de la modernidad fue el racionalismo; Descartes, su iniciador, se propuso hacer tabla rasa de la tradición y construir un nuevo edificio sobre la base de la razón y con la eficaz metodología de las matemáticas. Su «duda metódica» no cuestionó a Dios, sino todo lo contrario; sin embargo, al igual que Galileo, hubo de sufrir la persecución a causa de sus ideas.

René Descartes se educó en el colegio jesuita de La Flèche (1604-1612), por entonces uno de los más prestigiosos de Europa, donde gozó de un cierto trato de favor en atención a su delicada salud. Los estudios que en tal centro llevó a cabo tuvieron una importancia decisiva en su formación intelectual; conocida la turbulenta juventud de Descartes, sin duda en La Flèche debió cimentarse la base de su cultura. Las huellas de tal educación se manifiestan objetiva y acusadamente en toda la ideología filosófica del sabio.

El programa de estudios propio de aquel colegio (según diversos testimonios, entre los que figura el del mismo Descartes) era muy variado: giraba esencialmente en torno a la tradicional enseñanza de las artes liberales, a la cual se añadían nociones de teología y ejercicios prácticos útiles para la vida de los futuros gentilhombres. Aun cuando el programa propiamente dicho debía de resultar más bien ligero y orientado en sentido esencialmente práctico (no se pretendía formar sabios, sino hombres preparados para las elevadas misiones políticas a que su rango les permitía aspirar), los alumnos más activos o curiosos podían completarlos por su cuenta mediante lecturas personales.

Años después, Descartes criticaría amargamente la educación recibida. Es perfectamente posible, sin embargo, que su descontento al respecto proceda no tanto de consideraciones filosóficas como de la natural reacción de un adolescente que durante tantos años estuvo sometido a una disciplina, y de la sensación de inutilidad de todo lo aprendido en relación con sus posibles ocupaciones futuras (burocracia o milicia). Tras su etapa en La Flèche, Descartes obtuvo el título de bachiller y de licenciado en derecho por la facultad de Poitiers (1616), y a los veintidós años partió hacia los Países Bajos, donde sirvió como soldado en el ejército de Mauricio de Nassau. En 1619 se enroló en las filas del Maximiliano I de Baviera.

Según relataría el propio Descartes en el Discurso del Método, durante el crudo invierno de ese año se halló bloqueado en una localidad del Alto Danubio, posiblemente cerca de Ulm; allí permaneció encerrado al lado de una estufa y lejos de cualquier relación social, sin más compañía que la de sus pensamientos. En tal lugar, y tras una fuerte crisis de escepticismo, se le revelaron las bases sobre las cuales edificaría su sistema filosófico: el método matemático y el principio del cogito, ergo sum. Víctima de una febril excitación, durante la noche del 10 de noviembre de 1619 tuvo tres sueños, en cuyo transcurso intuyó su método y conoció su profunda vocación de consagrar su vida a la ciencia.

La filosofía de Descartes

Descartes es considerado como el iniciador de la filosofía racionalista moderna por su planteamiento y resolución del problema de hallar un fundamento del conocimiento que garantice su certeza, y como el filósofo que supone el punto de ruptura definitivo con la escolástica. En el Discurso del método (1637), Descartes manifestó que su proyecto de elaborar una doctrina basada en principios totalmente nuevos procedía del desencanto ante las enseñanzas filosóficas que había recibido.

Convencido de que la realidad entera respondía a un orden racional, su propósito era crear un método que hiciera posible alcanzar en todo el ámbito del conocimiento la misma certidumbre que proporcionan en su campo la aritmética y la geometría. Su método, expuesto en el Discurso, se compone de cuatro preceptos o procedimientos: no aceptar como verdadero nada de lo que no se tenga absoluta certeza de que lo es; descomponer cada problema en sus partes mínimas; ir de lo más comprensible a lo más complejo; y, por último, revisar por completo el proceso para tener la seguridad de que no hay ninguna omisión.

El sistema utilizado por Descartes para cumplir el primer precepto y alcanzar la certeza es «la duda metódica». Siguiendo este sistema, Descartes pone en tela de juicio todos sus conocimientos adquiridos o heredados, el testimonio de los sentidos e incluso su propia existencia y la del mundo. Ahora bien, en toda duda hay algo de lo que no podemos dudar: de la misma duda. Dicho de otro modo, no podemos dudar de que estamos dudando. Llegamos así a una primera certeza absoluta y evidente que podemos aceptar como verdadera: dudamos.

Pienso, luego existo

La duda, razona entonces Descartes, es un pensamiento: dudar es pensar. Ahora bien, no es posible pensar sin existir. La suspensión de cualquier verdad concreta, la misma duda, es un acto de pensamiento que implica inmediatamente la existencia del "yo" pensante. De ahí su célebre formulación: pienso, luego existo (cogito, ergo sum). Por lo tanto, podemos estar firmemente seguros de nuestro pensamiento y de nuestra existencia. Existimos y somos una sustancia pensante, espiritual.

A partir de ello elabora Descartes toda su filosofía. Dado que no puede confiar en las cosas, cuya existencia aún no ha podido demostrar, Descartes intenta partir del pensamiento, cuya existencia ya ha sido demostrada. Aunque pueda referirse al exterior, el pensamiento no se compone de cosas, sino de ideas sobre las cosas. La cuestión que se plantea es la de si hay en nuestro pensamiento alguna idea o representación que podamos percibir con la misma «claridad» y «distinción» (los dos criterios cartesianos de certeza) con la que nos percibimos como sujetos pensantes.

Clases de ideas

Descartes pasa entonces a revisar todos los conocimientos que previamente había descartado al comienzo de su búsqueda. Y al reconsiderarlos observa que las representaciones de nuestro pensamiento son de tres clases: ideas «innatas», como las de belleza o justicia; ideas «adventicias», que proceden de las cosas exteriores, como las de estrella o caballo; e ideas « ficticias», que son meras creaciones de nuestra fantasía, como por ejemplo los monstruos de la mitología.


René Descartes

Las ideas «ficticias», mera suma o combinación de otras ideas, no pueden obviamente servir de asidero. Y respecto a las ideas «adventicias», originadas por nuestra experiencia de las cosas exteriores, es preciso obrar con cautela, ya que no estamos seguros de que las cosas exteriores existan. Podría ocurrir, dice Descartes, que los conocimientos «adventicios», que consideramos correspondientes a impresiones de cosas que realmente existen fuera de nosotros, hubieran sido provocados por un «genio maligno» que quisiera engañarnos. O que lo que nos parece la realidad no sea más que una ilusión, un sueño del que no hemos despertado.

WILLIAM WHEWELL

                                                WILLIAM WHEWELL Filósofo y hombre de ciencia inglés, nacido en Lancaster en 1794 y muerto en...